Mostrando entradas con la etiqueta Pies. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Pies. Mostrar todas las entradas

miércoles, 28 de abril de 2021

Calzad@ por lo más "hot" de la temporada, pero me duelen los pies.


Helmut Newton, zapatos de tacón alto y bracelete de Cartier. París 1994

Los pies son una de las partes de nuestro organismo que más sufre y que menos atenciones recibe. La piel que recubre el pie, se ha ido adaptando a la especial función que desempeña, de forma que presenta muchas diferencias con respecto al resto del epitelio corporal, sobre todo la de la zona plantar. De ahí que cuando hemos querido "aprovechar" para su cuidado, los cosméticos de las manos, piernas...no nos han funcionado.

Las zonas que sirven de apoyo y las que presentan presiones o roces requieren unos cuidados particulares. La población de países desarrollados presenta un 80% problemas relacionados con los pies. Además de soportar a diario el peso corporal y pasar muchas horas encerrados en los zapatos, se someten a agresiones agravadas por lo que dicta la moda: tacones altos, zapatos estrechos, running, materiales sintéticos...

Las dolencias de dicha zona, derivadan en ampollas, sensación de cansancio, hinchazón...Afecciones no catalogadas como graves, pero sí lo suficientemente molestas como para mermar nuestra capacidad de estar bien. 

Material necesario para renovar tus pies
  • Cremas hidratantes, queratolíticas y regeneradoras específicas en ingredientes y concentración de las mismas para la piel de dicha zona. Lo mismo que el acabado cosmético del producto por su buena o no penetración en la piel. Cuanto más elástica esté la piel, menos posibilidad de lesión habrá frente a la fricción del calzado.
  • Stick anti-fricción de Compeed



Su composición de aceite vegetal hidrogenado reduce de forma inmediata e invisible la fricción en la piel. Aplicar en los pies o en cualquier parte del cuerpo donde se quiera prevenir un rozamiento excesivo de la piel: con zapatos nuevos, haciendo deporte..etc. No mancha ni resbala. Utilizar sólo en piel sana.
  • Ante una incipiente lesión, apósitos especiales para ampollas.
Gracias a la tecnología hidrocoloide, el apósito absorbe el líquido que exuda la ampolla y regula el grado de humedad generando las condiciones ideales para curar rápidamente. Permanece pegado el tiempo necesario para curar la ampolla, que varía de una persona a otra.

¿Preparados para darlo todo y no caer en la vida sedentaria?

martes, 28 de marzo de 2017

¡¡Solución para los hongos!!


En verano son muy comunes las infecciones de hongos en los pies. No es una afección grave, pero si puede llegar a ser bastante molesta. Generalmente, las personas que sufren hongos en los pies, suelen tener varias recurrencias a lo largo del año.

¿Qué son los hongos? Estos pequeños compañeros de viaje que a veces nos echamos, son diminutos organismos parásitos que no son ni una planta ni un animal. Los hongos, prosperan en ambientes húmedos y cálidos, y se alimentan de la queratina, que es la proteína principal de las uñas, el cabello y la piel.

Hongos en las uñas

La infección por hongos en las uñas, o la onicomicosis, es la alteración de las uñas más común y es responsable de alrededor del 50% de todas las infecciones de las uñas. Los hongos en las uñas son una causa de sobreproducción de queratina en las uñas, haciendo que sean más gruesas y que se separen de su lecho.

Nuestros pies albergan cerca de 200 tipos de hongos - más que cualquier otro lugar de nuestro cuerpo - pero no todos ellos son malos. Los dos tipos de hongos principales que causan infecciones de las uñas son los dermatofitos y las levaduras. Los dermatofitos son generalmente los culpables de los hongos en las uñas en las regiones templadas del mundo, mientras que las levaduras tienen mayor prevalencia en los trópicos y son más propensas a causar infecciones en las uñas de las manos. Hay muchas levaduras diferentes que pueden causar onicomicosis en las uñas de las manos, pero la mayoría de los casos son el resultado de una que seguro que os suena, la Candida albicans. Es la misma levadura que ocasiona la candidiasis vaginal. El moho es otra causa común de las infecciones por hongos en las zonas tropicales.

Infección de la piel por hongos

El pie de atleta, que hace que la piel entre los dedos se enrojezca, se escame y pique, es una de las causas más comunes de infecciones por hongos en la piel del pie. Además de los dedos del pie, también se puede presentar en los talones, las palmas de las manos y entre los dedos de las manos. De todas las personas que padecen el pie de atleta, aproximadamente un tercio se ven afectadas también por hongos en las uñas. 

Factores que pueden favorecer la aparición de hongos

  • La humedad. Los hongos se desarrollan muy bien en los ambientes cálidos y húmedos por éso crecen en piscinas y duchas. De hecho, los nadadores tienen el triple de probabilidades de contraer la enfermedad en comparación con la población en general. Los hongos en las uñas también son contagiosos, por lo que el uso de duchas públicas y caminar descalzo por el suelo en un vestuario, aumenta el riesgo de contagiarse la enfermedad de otras personas.
  • Calzado ajustado. La onicomicosis, es más común en las uñas de los pies que en las uñas de las manos, en parte debido a que el ambiente oscuro, húmedo y cálido del calzado es una "sala de fiesta"para los hongos. El calzado también restringe la circulación en los pies, lo que hace más difícil que el sistema inmunológico detecte y combata la infección. El uso de calzado muy ajustado y sin buena transpiración y traumatismos constantes, es probablemente una de las razones por las que los atletas se ven afectados en una proporción mucho mayor por las infecciones por hongos. 
  • Enfermedades y medicamentos. Si tenemos el sistema inmunológico debilitado debido a una enfermedad o a medicamentos como los esteroides o antibióticos, seremos más vulnerables a una infección por hongos de las uñas. La psoriasis, las enfermedades inflamatorias intestinales, el SIDA, la diabetes, el cáncer o la mala circulación se han relacionado con un mayor riesgo para padecer infecciones por hongos en las uñas. 
  • Edad. La onicomicosis se vuelve más frecuente con la edad y hasta el 50% de las personas mayores de 70 se ven afectadas. Esto es probablemente debido al hecho de que las personas mayores tienen peor circulación y unas uñas más gruesas que tardan más en crecer hacia fuera.
  • La historia familiar. Los hongos en las uñas no son hereditarios, pero puede hacer que sea más susceptible a contraer la infección. Si un miembro de la familia tiene onicomicosis, otros también pueden contraer la enfermedad debido al uso de la misma ducha o compartir artículos personales como toallas. Las toallas deben ser de uso personal. 
  • Otros factores. Fumar, usar uñas artificiales, comerse las uñas y la sudoración excesiva se han asociado con un mayor riesgo de infección por hongos en las uñas. También es más común entre los hombres que entre las mujeres.
Paciente con recurrencias tratado con AROMADERM. En una semana el hongo desapareció.

Pranarôm, una vez más, funciona a niveles insospechados. AROMADERM Uñas certificado BIO es una loción que soluciona y en tiempo récord, este incómodo problema. Hemos hecho la prueba con este producto en pacientes recurrentes, que han probado todo tipo de tratamientos, incluidos fármacos antifúngicos. La mayoría de las pacientes tratados con este producto, han coincidido en que ninguno ha tenido la efectividad de AROMADERM UÑAS.

¿Es una poción milagrosa? No, no existen. Esta "pócima" es una SINERGIA con aceites esenciales quimiotipados, 100% puros y ecológicos: Palmarosa (antiinfeccioso de amplio espectro), Lemongrass (antiinfeccioso selectivo de hongos), Niaulí (inmunoestimulante), Lavandín súper (antiséptico de alta afinidad por la piel), Citronela de Madagascar (tonicidad de las uñas), Clavo (aceite esencial de elevada potencia antiinfecciosa), Hipérico (cuidado de las pieles frágiles y enrojecidas), Katrafay (antipruriginoso). Todo ello en una base del aceite vegetal más polivalente que es Nuez de Albaricoque.


Alternativa barata y eficaz. Frasco con pincel aplicador. 10 ml cuesta 9,5 € aproximadamente. 

Esta sinergia, purifica la piel de los pies y de debajo de las uñas. Una de las grandes ventajas de los aceites esenciales es que algunos son antiinfecciosos de amplio espectro, es decir, actúan sobre: bacterias, virus, hongos o parásitos. Los hongos, son especies muy sensibles a los aceites esenciales.

Aplicar varias gotas directamente sobre la zona afectada una o dos veces al días hasta que mejore durante 4-6 semanas.  Hemos visto pacientes con recurrencias que en cuestión de una semana, el pie de atleta, ha desaparecido.

No utilizar en niños menores de 30 meses ni durante el embarazo o la lactancia. 

domingo, 10 de abril de 2016

La novia del running: la ampolla


Estamos entrando en una nueva estación, primavera, época en la que estrenamos zapatos, comenzamos a hacer deporte y los más atrevidos, sacan ya las sandalias. El escenario es perfecto para conocer a la gran protagonista de esta historia, las ampollas.

El calor, la humedad y la fricción en los pies son el escenario perfecto para que la veamos en todo su apogeo. Cada uno de estos 3 factores están relacionados entre sí, creando un círculo vicioso.

Cada paso que damos significa una pequeñísima fricción entre el suelo, la zapatilla, el calcetín o media y, por último, y lo que tenemos que cuidar más: el pie. Para evitar la aparición de ampollas tendremos que utilizar unas zapatillas o zapatos que ni aprieten ni nos queden grandes y que transpiren bien el calor.



El running se está convirtiendo en un deporte líder con miles de seguidores. Vamos a repasar unos aspectos básicos para evitar sufrir ampollas.

Calcetines:
  • Ejercen una función de protección entre zapatilla y piel y una función de evacuación del sudor que se genera al correr. El exceso de humedad por la sudoración puede macerar la piel y predisponer la aparición de ampollas.
  • Calcetines con fibras sintéticas evacuan mejor la humedad que las fibras naturales (algodón o lana), que retienen esa humedad.
  • En las ampollas que aparecen en los dedos de los pies, una opción fantástica son los calcetines con compartimentos específicos para cada dedo.
Cuidado de la piel:
  • Es conveniente proteger con "cremas efecto doble piel" las zonas con mayor riesgo (zona de la planta de los dedos y talón).
  • Mantener la piel hidratada rebaja el riesgo a sufrir este tipo de lesiones. La hidratación en la planta del pie sólo es efectiva con cremas específicas para pies; no sirven las cremas hidratantes corporales. 
Apósitos doble piel:
  • Pueden utilizarse no sólo para curar sino para prevenir las ampollas.
  • Forman un gel protector que regula el nivel de humedad favoreciendo una óptima curación.
  • Regulan las terminaciones nerviosas proporcionando alivio inmediato frente al dolor, algo que la tira adhesiva tradicional no hace.
Esperemos que con este simple repaso, de los únicos "blisters" que hablemos, sean los de los analgésicos para la cabeza por una buena fiesta, no por el sufrimiento de nuestros pies.

martes, 17 de junio de 2014

Cambio de temporada en los pies... ampollas sufriré


Al salir hoy de una reunión de la farmacia de una amiga, y observar el día tan caluroso que teníamos, una frase nos ha inspirado la entrada del día:

"Necesito por favor una silla, tiritas y buen consejo para soportar el dolor de pies que tengo"

Estos días de calor, aunque nuestros zapatos estén "rodados", nuestros pies pueden sufrir alguna que otra ampolla. Las principales causas de este terrible suceso son, entre otras, el uso de zapatos de material sintético, que no se adapten bien al pie y que dificulten la transpiración. Los zapatos muy puntiagudos, apretados o tacones excesivamente altos también pueden causar estragos, al igual que las arrugas de los calcetines y los zapatos de la talla equivocada.

¿Quién no ha sido protagonista de un pie sudado, que resbala en un zapato demasiado rígido un día caluroso  y acaba llorando sus dolorosas ampollas?


Quince minutos estrenando zapatos bastan para acabar padeciendo una ampolla, ¿qué hacer entonces?

1. Lo primero que hay que hacer cuando aparece una ampolla o una simple rozadura es lavar minuciosamente la zona con agua y jabón para evitar que se infecte, secarla bien, aplicar un antiséptico y cubrirla con un apósito.

2. Cuando la ampolla ya tiene líquido en su interior lo mejor es no pincharla, pero si está en la planta del pie y hay que seguir caminando no queda otro remedio. Pínchela con una aguja esterilizada, pero sin retirar la piel muerta, ya que sirve de protección.

3. Si la herida está infectada, desinféctela y cuando la herida esté completamente seca, aplique un apósito y deje que el proceso natural de cicatrización de la piel siga su curso. Si tiene dudas, su farmacéutico podrá ayudarle a solventarlas.


Cuidado con el furor "chanclas", concebidas para la playa y la piscina, no para 'ir a trabajar' o 'salir de paseo' por el asfalto de la gran ciudad. El pie suda más de la cuenta en ellas, y dada a su escasa sujeción no es complicado acabar el día con un esguince o una torcedura. Además, el pie queda expuesto a cortes o magulladuras. Las heridas están servidas. ¡¡No me pises que llevo chanclas!!