A tope los piojillos aún con pandemia

Remedios naturales "anti-pipis"

Aún no podemos entender, con todas las medidas de restricción de contacto entre niños, apenas actividades deportivas tipo piscina...cómo los "mini-piel" vienen con notificaciones del colegio que en el aula hay piojos. Seguro que habrá muchas razones técnicas, pero en la primera que pensamos ya como padres, no como boticarios, que hay alguien que los libera conspiratoriamente..ja ja.

Nuestra estrategia principal para evitar ocupación en el "HOTEL CABEZA" es prevención con aromaterapia y revisión periódica con lendrera en mano.

Vamos a poner orden a todas las leyendas urbanas y vamos a hacer bien los tratamientos.

TRATAMIENTO SIN INSECTICIDAS

LENDRERA

Parte fundamental del tratamiento y que muchos, la mayoría, padres pasan por alto. Peine de púas rígidas muy próximas entre si (0,2 a 0,3 mm), para que atrape a los piojos y arranque las liendres. Para peinar una cabellera larga es mucho mejor un peine de púas rígidas y largas.

• Las mejores son las de metal, que NO VIENEN INCLUÍDAS  en al tratamiento de piojos.
• Puede pasarse con el pelo seco o mojado, pero es más eficaz con el pelo mojado, especialmente si usamos alguna crema suavizante o acondicionadora, ya que facilita el paso del peine y enlentece los movimientos del insecto.
• Después de cada pasada hay que limpiar la lendrera.
• Se puede repetir cada tres o cuatro días. 

TRATAMIENTO CON EXTRACTOS DE PLANTAS

Hay aceites esenciales vegetales, como el aceite de árbol de té, lavanda que son pediculicidas, pero no porque maten a los inquilinos, sino porque los repelen como si ni hubiera un mañana.  Además para en medio de esta vorágine que estamos viviendo, estos dos aceites esenciales, son muy interesantes porque son potentes antivíricos a parte de estimular el sistema inmunológico.

SILICONAS SINTÉTICAS: DIMETICONAS

Se trata de un producto inodoro, incoloro e hidrofóbico. Su mecanismo de acción consiste en cubrir la cutícula del piojo, ocupando los conductos que se encuentran en ella destinados a la oxigenación del parásito. Así pues, el mecanismo de acción es meramente mecánico, limitando su aporte de oxígeno en menos de 1min y ocasionándole a la muerte en pocas horas. Es más efectivo en pacientes con infestaciones leves.

Pese a que la dimeticona a baja concentración (4%) tiene baja actividad ovicida, hay estudios que han demostrado que la dimeticona a alta concentración (92%) tiene una actividad ovicida cercana al 95%.

TRATAMIENTOS CON PRODUCTOS DE SÍNTESIS QUÍMICA

Hay varias clases de productos, Piretrinas y Malatión. No existe evidencia clara sobre la superioridad de un tratamiento frente a otro, pero a día de hoy se decantan por las Piretrinas y, entre ellas, la Permetrina al 1% es la más recomendada, por su poder para destruir las liendres y sus escasos efectos adversos. El tiempo de aplicación es de 10 minutos.

La eficacia de un insecticida depende en buena medida de su formulación. Hay excipientes que potencian de manera significativa el efecto pediculicida y ovicida de las piretrinas, bien por tener propiedades insecticidas sinérgicas o por otros motivos. La forma CHAMPÚ no es aconsejable porque el producto se diluye y el tiempo de contacto es muy excaso.

El Malatión es una buena alternativa a la permetrina. No se puede usar en niños menores de 2 años, tiene olor desagradable y el tiempo de aplicación requerido es largo.

Aplicación correcta del insecticida:

1. Se impregna bien el pelo y el cuero cabelludo, sin frotar. Quien aplica el tratamiento debe lavarse después las manos o usar guantes de plástico para limitar el contacto o la absorción innecesaria del insecticida.

2. En ambientes con piojos resistentes, el tiempo de exposición de 10 minutos con permetrina es claramente insuficiente. Puede ampliarse hasta 12 horas sin riesgo de toxicidad por absorción. Con malatión son suficientes de 10 a 20 minutos.

3. Si usamos soluciones (que gotean) o el tiempo de contacto va a ser prolongado, se puede recoger el pelo con un gorro de plástico (no con una toalla, porque empaparía el insecticida).

4. Pasado el tiempo deseado, se aclara bien con agua y si se usa un champú, en ningún caso se debe usar que contenga el mismo insecticida, como inducen a pensar los que venden en un mismo paquete ambos productos.

5. Después de aclarar el tratamiento, es el momento ideal para pasar una buena lendrera. Se peina desde la raíz, separando por mechones. La lendrera se va limpiando con un paño observando el tamaño y movilidad de los piojos recuperados. La señal de eficacia es que ninguno se mueva. Si los recuperados se mueven con vitalidad, el insecticida, tal como fue aplicado, no es eficaz.

6. El pelo se deja secar al aire o con toalla (no con secador, porque el calor podría rebajar la acción del insecticida). Para corroborar éxito, al de una semana se pasa de nuevo  la peineta. Por tanto, tras permetrina o similares,  aconsejamos repetir el tratamiento a los 9 días. Con malatión no es necesaria una segunda aplicación. No se puede repetir el tratamiento más de dos veces. Si aún ni con esas los hemos eliminado, tendremos que pensar en otras soluciones. ¡¡Pero eso os lo cuento en la próxima entrada!!